Autor para correspondencia: MVZ. Ana Leticia Oregon Miranda

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¿Estás interesado en adquirir un perro de raza grande o gigante a tu hogar? Estas grandes y adorables razas pueden ofrecerte mucho afecto y diversión, tan grandes como ellos. Aunque cada perro tiene un conjunto inherente de rasgos que pueden afectar su esperanza de vida, vulnerabilidad a las enfermedades y otros problemas relacionados con la salud, un perro grande o gigante requiere cuidados especiales debido a su gran altura. Estos cuidados incluyen necesidades nutricionales específicas y requisitos de actividad física, además de problemas de salud comunes. También necesitas saber cómo variarán estas necesidades a medida que los perros grandes pasen por diferentes etapas de la vida.

Aunque no existe un rango de peso de perro grande generalmente aceptado, la mayoría de los veterinarios consideran cualquier perro, independientemente de la raza o mezcla de razas, que pese entre 22 a 37 kg como perro grande. En cuanto a los perros gigantes su peso oscila entre los 38 kg hasta 90 kg.

Algunas de las razas de perros grandes más comunes son Pastor Belga Malinois, Golden retriever, Setter irlandés y Husky siberiano. Entre las razas más populares de perros gigantes se encuentran el gran danés, el mastín, el perro de montaña de Berna y el Terranova

Es importante investigar antes de agregar un perro grande a tu hogar. Toma el tiempo para hablar con otros dueños y criadores de perros grandes o gigantes y así tener una idea clara de cómo es vivir con un perro de esta talla.

Como se menciona en nuestro blog sobre el cuidado general de los perros, el desarrollo de programas de salud y medicina preventiva adaptados a las necesidades individuales de cada mascota se hace a partir de la división de su esperanza de vida en etapas. Estas etapas de vida son una guía del estado fisiológico en el que se encuentra la mascota y las necesidades que se deben satisfacer.

Podemos dividir la esperanza de vida de los perros medianos en las siguientes etapas:

• Cachorro: hasta los 2 años.
• Adulto joven: Hasta los 4 años
• Adulto maduro y geronte: desde los 6 años

Planifica con anticipación si deseas tener un perro de raza grande o gigante, ya que generan gastos del mismo tamaño. Necesitan camas, jaulas y juguetes más grandes. Mantén los juguetes pequeños fuera del alcance, para no crear un peligro de asfixia para tu gran mascota. Asegúrate de que los collares y las correas sean lo suficientemente resistentes para soportar su fuerza. Los perros grandes y gigantes también requieren más espacio, no solo para vivir, sino también para el transporte (así que considera el tipo de vehículo que tienes antes de comprar un perro grande). Estos pequeños elefantes comen más comida, así que espere gastar más en la tienda de mascotas también. Los medicamentos en el veterinario, incluso los preventivos básicos, como los antiparasitarios y los antipulgas y garrapaticidas, pueden ser más costosos para las mascotas de mayor tamaño, así que prepárate.

Todo cachorro recién adquirido, ya sea por adopción o compra, debe ser evaluado por un médico veterinario lo antes posible para determinar su estado de salud y descartar alguna condición del desarrollo o hereditaria. Este es el momento indicado para aclarar cualquier duda sobre su cuidado y comportamiento. En estas primeras visitas se acostumbra a realizar exámenes de heces para descartar infestaciones por parásitos intestinales.

Además, el punto más importante de estas consultas es el desarrollo del esquema de vacunación primario para el cachorro, su aplicación se inicia entre el mes y medio y dos meses de edad con repeticiones cada 3 o 4 semanas hasta que el cachorro cumple 4 meses.

Para perros adultos jóvenes y sanos se recomienda realizar un estudio de sus valores biológicos entre el año y cuatro años de vida para tener una referencia de normalidad. Los adultos maduros, es decir a partir de los 6 años, deben de ser evaluados por el médico veterinario una vez al año y realizar exámenes sanguíneos en esas visitas. También se pueden realizar estudios de imagen u otras pruebas diagnósticas según el estilo de vida o predisposición genética.

Uno de los problemas más comunes que vemos con los perros mayores de razas grandes son los problemas de movilidad. Es importante mantener las uñas de su perro recortadas y tratar el dolor en las articulaciones. Existe una variedad de tratamientos y suplementos para controlar el dolor articular, como el omega 3, antiinflamatorios y analgésicos.

Al igual que otras tallas de perro, los de raza grande o gigante pueden sufrir de enfermedad periodontal a causa de la acumulación de sarro y gingivitis. Para su prevención se recomienda instaurar una rutina de limpieza dental a partir de los 8 meses de edad, cuando terminan de aparecer los dientes permanentes. Por otro lado, estos perros son más propensos a sufrir fracturas dentales por masticación agresiva. Si la fractura expone el interior del diente (la cavidad pulpar), la infección viaja por el diente hasta su raíz, provocando un absceso y la pérdida del diente. Para evitar estas fracturas se recomienda elegir juguetes adecuados, como regla general busca objetos que puedas doblar con la mano sin mucha fuerza o que puedas dejar la uña marcada en su superficie.

En las evaluaciones prevacunales y las de bienestar para perros adultos maduros y geriátricos se debe incluir una evaluación dental constante y se recomienda realizar profilaxis dentales bajo anestesia cada 4 años a partir de los 3 años de vida. Las razas con pelaje más largo en el hocico pueden necesitar una limpieza dental antes.

La etapa juvenil o de cachorro es vital crucial para la socialización, la prevención de fobias y el entrenamiento. El período más importante de socialización de su cachorro es entre las 2 y las 12 semanas de edad. Este es también el momento en que tu cachorro es más susceptible a las enfermedades, así que asegúrate de encontrar entornos controlados donde pueda tener experiencias de socialización seguras.

Tu cachorro es más susceptible a desarrollar miedos o fobias entre las 8 y 10 semanas de edad. Solo usa refuerzo positivo y manejo suave, y nunca castigues a tu perro (gritar, encerrar por un mal comportamiento).

En la etapa adulta también es importante proporcionar la estimulación física y mental adecuada para su mascota. Esto puede incluir:

• Entrenamiento de agilidad
• Carreras de obstáculos
• Juguetes de rompecabezas o juguetes para dispensar alimentos
• Juegos de búsqueda

Para los adultos mayores si bien es importante mantener su salud física, también se debe cuidar su salud mental a medida que envejece. El hecho de que tu perro sea mayor no significa que no necesite estimulación mental.

Puedes ayudarlos por medio de juegos y actividades; hay muchas actividades de bajo impacto que puedes hacer con tu perro mayor.

Dado que su tasa de crecimiento es más rápida, una nutrición adecuada es vital durante el primer año de vida de los perros talla grande. Necesitan un equilibrio especial de menos grasas, menos calcio y proporciones de proteínas seleccionadas para fomentar una tasa de crecimiento adecuada. Crecer demasiado rápido y demasiado pronto puede causar tensión corporal y daños a largo plazo. También recuerda, sus placas de crecimiento son frágiles durante la etapa de cachorro y pueden dañarse con demasiado ejercicio riguroso. Evita ciertas actividades que causen demasiado estrés en las articulaciones en crecimiento, como correr sobre concreto o saltar de superficies altas.

A medida que tu cachorro de raza grande alcanza la edad adulta y deja de crecer (generalmente alrededor de los 28 a 24 meses), este debe pasar gradualmente a una dieta adulta de raza grande adecuada en el transcurso de siete días para evitar malestar gastrointestinal (GI).

Una vez que su perro comienza a alcanzar la edad "mayor" (aproximadamente 7 años), puede pasar gradualmente a una dieta adecuada para perros geriatras. Aunque la mayoría de los alimentos para perros adultos de razas grandes son adecuadas, existen dietas formuladas específicamente para perros mayores de razas grandes. Por lo general, contienen glucosamina y vitaminas y minerales para ayudar a mantener la salud cognitiva y de las articulaciones. Para este mismo fin, es importante ofrecer suplementos con omega 3 para controlar respuestas inflamatorias anormales, además de que es un potente neuroprotector.

Referencias:

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